🧯 Los extintores: tu primera lÃnea de defensa
Un extintor puede marcar la diferencia entre un conato y un incendio grave. Sin embargo, para que funcione cuando realmente lo necesites, requiere mantención básica y revisiones periódicas. Aquà te dejamos un desglose más detallado de los cuidados esenciales:
1. Revisión visual mensual
- Asegúrate de que el extintor esté en un lugar visible, de fácil acceso y sin obstáculos.
- Comprueba que la etiqueta con instrucciones sea legible.
- Observa que la boquilla y la manguera no tengan grietas, torceduras o bloqueos.
2. Verificación del manómetro
- El manómetro (el indicador circular con aguja) debe estar siempre en la zona verde.
- Si marca en rojo (bajo o sobrepresión), el extintor no funcionará correctamente y debe ser revisado de inmediato.
3. Estado fÃsico del extintor
- Examina que el cilindro no tenga golpes, óxido ni señales de corrosión.
- Verifica que el sello de seguridad esté intacto, lo que asegura que no ha sido manipulado.
4. Ubicación adecuada
- No lo tapes con muebles, cajas o cortinas: un extintor oculto es un extintor inútil.
- Manténlo a una altura accesible: en hogares suele instalarse a 1,20 m del suelo, y en oficinas según normativa local.
5. Recarga y mantención profesional
- Todos los extintores requieren recarga periódica (generalmente cada 1 año, dependiendo del tipo y normativa).
- Deben someterse a prueba hidrostática cada ciertos años, para asegurar que el cilindro resista la presión.
- La recarga y mantención solo debe realizarla un servicio autorizado.
✅ Conclusión
Un extintor es como un seguro: quizás nunca lo uses, pero si llega el momento, debe estar listo al 100%. Con simples rutinas de revisión y un servicio profesional de mantención, prolongarás su vida útil y garantizarás tu seguridad y la de quienes más quieres.